EL CONFLICTO DE GAZA: Valoraciones

Partiendo del conocimiento, más o menos, preciso de los aspectos más relevantes del conflicto palestino-israelí ya me encuentro en la posición de expresar una valoración sobre los últimos ataques del ejército israelí sobre la Franja de Gaza. Empecemos por el principio:

Mediante un comunicado dirigido a la prensa internacional, Israel alegó que: "la acción militar está destinada a defender a los residentes del Estado de Israel"

En los últimos ocho años, desde el paseo de la Explanada de las Mezquitas por parte de Sharon en el año 2000, 3700 cohetes Kassan y artillería de mortero  cayeron sobre las ciudades del sur de Israel. El actual Primer Ministro de Israel en funciones, Ehud Ólmert se vió obligado por  presiones de la ciudadanía israelí a poner freno a estos ataques y, alegando legítima defensa, inició la ofensiva en Gaza.

muertos

Estadíticas extraidas de la página web de la organización pro-derechos humanos
en los territorios ocupados B'Tselem

Estoy a favor del legítimo derecho de defensa de Israel pero nunca a costa de la vida de civiles y a día de hoy llevamos 820 los muertos en la franja tras dos semanas de bombardeos de los cuales entre un 25% y un 40%, según la fuente, son civiles según la ONU.

Ante este panorama deseo mostrar mi total disconformidad y condeno enérgicamente los ataques llevados a cabo por el gobierno israelí.

La legítima defensa solo es aceptable cuando no se producen víctimas civiles inocentes tanto desde el punto de vista humanitario como del derecho internacional o del sentido común. Incluso desde el punto de vista estratégico, ya que estos ataques indiscriminados provocan que más personas se unan a la causa. De hecho Hamás ha ganado estos días el apoyo de muchos palestinos de Cisjordania y de musulmanes de todo el mundo.

Probablemente esta sea una visión demasiado ingenua del problema porque: ¿cómo atacar a milicianos terroristas en una zona con una densidad de población tan alta sin causar víctimas civiles? y más teniendo en cuenta que Hamás los usa, en ocasiones, como escudos humanos. (Israel también sabe usarlos)

Sin embargo, el problema radica en que Israel pretende acabar con Hamás desde dos puntos:

  1. Militar; atacando las áreas de lanzamiento de cohetes, instalaciones de almacenamiento de armas, túneles de contrabandeo y grupos armados.
  2. Político; Hamás obtuvo la mayoría en las elecciones de 2006 en Gaza desplazando del poder a la Autoridad Nacional Palestina (A.N.P:). Israel pretende empeorar las condiciones de vida de la Franja y con ello debilitar electoralmente a Hamás. De esta forma daría más opciones a la A.N.P. para alcanzar el poder en las próximas elecciones de 2009 y la consecución de la paz sería más factible.

Recordemos que:

  • la Autoridad Nacional Palestina tiene una visión más moderada del conflicto ya que acepta los Acuerdos de Oslo con Israel, la existencia del Estado de Israel y está comprometida con la lucha antiterrorista como medio para alcanzar la paz.
  • Hamás no reconoce el Estado de Israel ni los Acuerdos de Oslo, tampoco acepta la resolución de la ONU de 1947 en la que se establecía la partición de Palestina en dos estados. Apoyan la lucha armada y los ataques suicidas contra civiles como medio para el logro de sus objetivos.

 

¿Está justificado un ataque para conseguir estos objetivos?

Repito, NO, si se producen víctimas civiles.

 

Bombas de racimo empleadas por el ejército israelí.

¿Cuál sería la solución?

En mi humilde opinión la solución a tan complejo problema o, al menos, la consecución de un acercamiento de las partes para alcanzar la paz pasaría por los siguientes puntos:

  1. Mejorar las condiciones de vida en la Franja de Gaza y Cisjordania. En 1994, Arafat firmó un acuerdo con varios países en el que estos se comprometían a otorgar una línea de crédito para utilizar en la reconstrucción de los territorios ocupados con el fin de potenciar su desarrollo y garantizar el éxito del proceso de paz. Si un acuerdo así se firmara a día de hoy la A.N.P. ganaría prestigio frente a los suyos y colaboraría en la obtención de un mayor número de votos por parte de Abbas de forma que la A.N.P. podría recuperar el poder en la Franja. Tanto Estados Unidos como la Unión Europea deben mostrar su apoyo. Es curioso que no se oiga hablar a los ingleses teniendo en cuenta que son los culpables del conflicto.
  2. Ambos partes deben actuar con contundencia frente a los radicales. Por un lado la A.N.P. debe hacer una promesa firme para actuar contra el terrorismo, por otro, Israel debe finalizar con la política de asentamientos y controlar a los radicales ultraortodoxos. Recordemos que uno de ellos, asesino a Isaac Rabin, el hombre que, probablemente, más hizo por la paz en Oriente Próximo,
  3. Los países árabes deberán ponerse de acuerdo. Irán, Siria y Hezbolá apoyan a Hámas, Egipto, Jordania y Arabia Saudí apoyan a la Autoridad Nacional Palestina y a su líder Mahmud Abbas.
  4. Ambas partes deberán renunciar a reivindicaciones que consideran irrenunciables y, por tanto, preparar a la opinión pública de sus respectivos territorios para esas renuncias.
  5. Jerusalén es históricamente el problema más complejo de la región, así que si no llegan a un acuerdo que se declare zona internacional. Así quedó establecido por la O.N.U. en el Plan para la Partición de Palestina de 1947.

 

Esto se me antoja imposible con Hamás en el poder y con la opinión pública israelí pidiendo más contundencia frente al terrorismo.

El escritor israelí Abraham B. Yehoshua dijo:

"la capacidad de sufrimiento de los palestinos es mucho mayor (que la de los israelíes), y eso los hace más fuertes. Cerrar los pasos fronterizos o cortar la luz no los hace detener los lanzamientos de cohetes, por eso la respuesta a de ser mayor"

En un principio estas declaraciones me escandalizaron, sin embargo, pensando detenidamente en ellas me di cuenta que explican a la perfección los hechos. No habla del sufrimiento, que para todo el mundo es el mismo, sino de la capacidad para soportarlo. Los israelíes hacen lo que sea necesario detener el terrorismo, (véase la Barrera de Cisjordania) aunque ello provoque graves problemas a los palestinos o viole las leyes internacionales. La única prioridad del gobierno israelí es la seguridad total de sus ciudadanos y no les importa vulnerar los derechos de los palestinos que sean necesarios con tal de conseguirla. Hamás, sin embargo, antepone sus intereses políticos y territoriales por encima de todo, aún a costa del sufrimiento de la población de Gaza.

En conclusión estoy a favor de:

  1. El derecho de existir del Estado de Israel y de su legítima defensa siempre y cuando no afecte irreparablemente a civiles inocentes.
  2. La creación de un Estado Palestino que goce de total autonomía, democrático y a poder ser laico

 

yo y jerusal

Comentarios

Entradas populares de este blog

Olvídate del Internet Explorer

Dogguie, las fotos más impactantes

Autoentrevista sobre la Huelga General